Verdades y mentiras de las comidas

“Un jugo de pomelo en ayunas quema las grasas”

FALSO
Ninguna fruta cumple con esta función.

“Después de comer sandía no se debe tomar vino“

NO ES CIERTO
Se ha comprobado que la mezcla de ambos no tiene efectos adversos.

“Los turrones y las frutas secas engordan”

ES RELATIVO
Si se consumen en reemplazo de productos con calorías equivalentes, no resultan engordantes. Por ejemplo, se puede consumir una cucharada menos de aceite en la ensalada y optar por 6 mariposas de nuez. En cuanto a los turrones que se venden en los kioscos, puede elegir uno como una colación, acompañado de una infusión o un líquido frío (gaseosa light, por ejemplo).

“Cocinar con vino no es saludable”

FALSO
La cocción con vino tiene sus ventajas. Por un lado, permite utilizar una menor cantidad de sal al resaltar el sabor original de las comidas sin alterar su contenido calórico. Por otro, las calorías que aporta el vino desaparecen porque durante la cocción se evapora el alcohol que las contiene. Además, muchas veces tierniza el alimento.

“El aceite de oliva no engorda”

FALSO
El aceite de oliva, al igual que el resto de aceites, aporta 9 calorías por gramo, por lo que se debe moderar su consumo en caso de exceso de peso. Una cuchara sopera (10 gramos) de aceite (oliva, girasol, maíz) aporta 90 calorías. Por eso es tan importante usar una cucharita al aliñar las ensaladas.

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