¿Somos veganos?

Empiezo esta entrada sobre la alimentación vegana y el veganismo en general con la pregunta: ¿Somos veganos?

Con esta cuestión me refiero a si el ser humano es vegano por naturaleza. Si su cuerpo está hecho para asimilar de forma más eficaz nutrientes de origen vegetal.
Me produce gran tristeza ver discusiones entre veganos y no veganos cada uno defendiendo lo que cree es mejor para el hombre. Estas discusiones normalmente solo sirven para que uno de los dos bandos imponga su razón, la tenga o no, normalmente desprestigiando al otro.


  • El vegano dice que el omnívoro es cruel por comer animales muertos y que eso le causará enfermedades.

  • El omnívoro le dice al vegano que su dieta está carente de proteínas y vitaminas y que a la larga tendrá problemas de salud.
Pues bien, yo creo que tiene que exisitr una alimentación óptima para el ser humano, para el cuerpo del ser humano. Pero lo que ocurre, y creo que esto no se tiene tan en cuenta, es que el ser humano también tiene una mente. Una mente mucho más compleja y profunda que la del resto de animales.

Por ejemplo, si le preguntamos a una vaca cual es su alimentación óptima no nos contestará porque no puede hablar. Es broma, si pudiese contestar, su intuición sabe claramente cuales son los alimentos que le convienen y cuales no. Su olfato le basta para saber si un alimento es apropiado o no. Y así todos los animales.


¿Qué ocurre con el ser humano? Que su instinto se ve nublado por la mente. Las demandas de su cuerpo se ven interferidas por sus pensamientos. Cocinamos y cubrimos los alimnetos con especias y condimentos para hacerlos más sabrosos hasta el punto de que apenas se percibe el sabor del alimento original.


Por ejemplo no es lo mismo un filete crudo que un filete a la plancha con sal y un chorrito de aceite de oliva.
Se ha creado toda una cultura alrededor de la alimentación, cultura que se graba en nuestras mentes y se transmite de generación en generación. Esto por supuesto no me parece mal, siempre que no perdamos el contacto con nuestro verdadero origen.


Podemos viajar al espacio o comunicarnos visualmente con alguien de Hong Kong pero todavía no sabemos lo que tenemos que comer. Los nutricionistas nos dicen que lo mejor es «una dieta variada» pero muchos de estos nutricionistas están obesos.

Personalmente, si creo que nuestro origen es vegano, especialmente frugívoro. Pero como decía al principio no me gustariá entrar en una discusión dando motivos de porque somos veganos y no debemos de comer carne. Por supuesto tengo mis motivos y experiencia personal para suponer esto pero no quiero convencer a nadie, no soy científico ni quiero serlo.

Yo creo que la naturaleza pone a todo ser vivo los nutrientes que le permiten desarrollarse de forma natural. Es decir, no creo que la naturaleza sea tan retorcida como para obligarnos a darle un tratamiento específico a nuestro alimento, me refiero a cocinarlo y a condimentarlo.
Es por esta idea por la que siempre he pensado que las frutas es el alimento óptimo del ser humano. Se pueden comer crudas, no es necesario cubrirlas con ningún condimento, su dulzor es exquisito, las masticamos facilmente, se digieren muy rápido y están cargadas de agua, vitaminas y minerales.


Con esto no quiero decir que una persona no pueda crecer y desarrollarse comiendo de todo. Porque la realidad es que el porcentaje de veganos en el mundo es mínimo y la gente que come de todo llega a viejo igualmente, pero habría que ver en que condiciones. Aunque es muy importante, hay más factores además de la alimentación que influyen en la salud de los seres humanos.


Lo mismo que una persona puede ser vegana porque entiende el mensaje de su cuerpo, el cual le pide que deje alimentos de origen animal y aumente los de origen vegetal. También puede hacerlo por razones morales, aquí es donde vuelve a entrar la mente y la cultura, al pensar que matar animales está mal.


Resumiendo, mi opinión es que el alimento óptimo del ser humano son frutas especialmente, frutos secos y semillas y verduras en estado crudo.
Nuestra mente más evolucionada y la cultura gastronómica nos crean nuevas necesidades que debemos buscar en la preparación de otros alimentos.
Por tanto, la cuestión de la nutrición es la combinación de las necesidades de nuestro cuerpo y los caprichos de nuestra mente. Por eso creo que es absurdo imponer una alimentación u otra a una persona si su mente le pide otra cosa. Por ejemplo, lo pasarás mal si eres vegetariano y te mueres por darle un bocado a la hamburguesa de tu amigo, de igual forma que tu cuerpo lo pasará mal si se alimenta exclusivamente de productos animales.


El tema de porqué la mente de los humanos empezó a pedir carne humana en la antigüedad, carne de animales posteriormente, cocinar los alimentos con fuego y empaquetarlos en envoltorios de colores en la actualidad es complejo. Espero profundizar en él a medida que madure el blog y yo mismo.